The Canarian No. 71
«Donde el cielo y el mar se encuentran»

La pardela cenicienta atlántica es una de las especies emblemáticas de nuestro archipiélago y, al mismo tiempo, una de las más amenazadas. Además de enfrentar la depredación natural, su supervivencia se ve gravemente comprometida por la contaminación lumínica y la caza ilegal.
Durante los meses de septiembre, octubre y noviembre, estas aves migran hacia el sur para pasar el invierno en las aguas pelágicas frente a las costas de África y Sudamérica. Este período es especialmente crucial para su protección, ya que las luces artificiales representan un gran peligro para ellas.
La iluminación es uno de los mayores enemigos de las pardelas. En esta época del año, los polluelos abandonan sus nidos y emprenden su primer vuelo. Sin embargo, tanto en el litoral como en el interior de las islas, la iluminación pública puede desorientarlos, haciéndolos caer al suelo en busca de refugio. Una vez en tierra, les resulta muy difícil retomar el vuelo sin una visión clara del mar.
Si encuentras un ejemplar caído, acércate despacio, cúbrelo con una prenda, colócalo en una caja de cartón y contacta de inmediato con el 112.

ARTISTA Edurne Armentia